La Alcazaba de Granada se construyó en el lugar que ocupaba la antigua Ilíbiris, donde había fortificaciones romanas y visigodas devastadas. Los musulmanes ocuparon este lugar con la edificación de nuevas murallas, conformando la Alcazaba qadima o antigua.
Esa fortificación fue mandada a levantar por el walí de Elvira, Asad b. Abd al-Rahman al-Xaybani, que no llegó a finalizarla. Tras su muerte, acaecida en el año 765, se completaron dos tramos, el más antiguo fue hecho durante el reinado Habus b. Maksan (1020-1037) y el otro por su sucesor Badis b. Habus (1037-1073), rey zirí que construyó el palacio Badis.
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